Todo amante de la lucha libre disfruta de cada evento que tenga que ver con un ring como escenario principal, así sea fuera de la misma actividad deportiva y solo sea para exhibición.
Como siempre, el arte y cultura pueden entrelazarse con cualquier disciplina deportiva, mucho más con una que es característica por su colorido y tradición impreso en sus famosas máscaras. O en la misma pasión que despierta esta lucha libre en sus fanáticos siendo parte de la idiosincrasia mexicana.
Por lo cual, la lucha libre cuenta con su primer y único museo, hasta el momento, pues se espera esta iniciativa crezca y se cuente con más recintos que tengan a este deporte dentro de sus actividades.
LOCALIZADO EN EL CORAZÓN DE TIJUANA
La ciudad elegida para ser sede de este museo llamado “MULLME” Museo de la Lucha Libre Mexicana, es el corazón de Tijuana, a un kilómetro del puerto fronterizo con Estados Unidos de San Ysidro. Este recinto abrió sus puertas en abril del 2017, siendo el único y primer museo dedicado a esta práctica.
Su colección reúne más de 6 mil 900 piezas. La colección privada de su director Mauricio Pino, originario de Tijuana, ciudad que ha sido cuna y de formación de muchos ídolos en este deporte.
Además entre los artículos que se pueden apreciar hay máscaras de luchadores, capas, cabelleras originales, pósters, revistas, monos de plástico tradicionales, butacas, llaveros, fotos, estatuillas, trofeos originales y muchísimos objetos más.
En palabras del encargado del museo, mencionó que todas las piezas son artesanales y únicas, y que se fueron coleccionando a lo largo de muchos años por parte de su director.
COLECCIONES PRIVADAS DE LOS MISMOS LUCHADORES
Agregó además que el mismo gremio de la lucha libre, al enterarse de este proyecto, donaron parte de sus colecciones privadas, como trofeos, máscaras, capas, entre otras cosas.
Otro detalle importante en este museo, es que el primer piso del edificio alberga el Museo del Coleccionista de Tijuana, que cuenta con 12 mil 900 mil piezas de superhéroes, productos históricos de marcas comerciales y muchísimas cosas más.
En el segundo piso, la magia de la lucha libre se va apoderando del lugar con unos murales enormes con los rostros de luchadores históricos de Tijuana y del país, así como la entrada una réplica de un “cuadrilátero”.
Y lo que lo hace más destacable según las palabras de su encargado es que siendo el único museo dedicado a la lucha libre lo hace más especial, pues existen exposiciones que son temporales en diversas partes del país, pero este museo al ser permanente le da un mayor valor en su conexión con la lucha libre, al tiempo que esperan expandir su colección, haciendo crecer este concepto.