Por René Sánchez
Llegó la esperada final de la ATP Cup y el ansiado duelo entre las dos mejores raquetas en la actualidad (además de Federer que no participó) y Serbia sacó provecho llegando más entera en lo físico.
Esta vez Rafael Nadal no pudo mostrar su mejor juego, erró en situaciones clave y Novak Djokovic lo forzó al máximo generando menor paridad de la que se esperaba entre ellos. Mientras el español perdió sus dos últimos singles del certamen Djokovic se despidió con hoja perfecta, ocho victorias en ocho duelos como el líder que necesita cualquier equipo para campeonar.
El primer punto lo ganó Roberto Bautista 7-5 y 6-1 a Dusan Lajovic y todo parecía pintarle bien a la Armada pero en el duelo en el duelo entre los dos mejores tenistas del mundo se impuso el serbio y la definición tuvo que darse en el dobles.
Para vencer a Rafael Nadal no solamente hay que tener calidad y Nole lo sabía muy bien y por eso jugó con una gran intensidad y con una mentalidad dispuesta a dar todo en cada una de sus acciones y obtuvo su gran recompensa al batir, además en solamente dos sets al de Mallorca, por 6-2 y 7-6.
Fue tanta la exigencia para Rafa en el torneo y en el partido frente a Djokovic que ya no tenía nada que dar en el dobles y España tuvo que dejar que lo disputaran Feliciano López y Pablo Carreño quienes también sucumbieron ante Djokovic, que si tuvo la energía suficiente para continuar, y Viktor Troicki 6-3 y 6-4, dándole así el título a Serbia de la primera edición de la nueva ATP Cup.