El 1 de mayo de 1994 el mundo del automovilismo y del deporte en general se estremeció con la trágica noticia de la muerte de Ayrton Senna Da Silva tras estrellarse en la temible curva Tamburello del Circuito de Imola de San Marino y hoy 26 años después, la escudería Ferrari, para la que corría en aquel día el piloto brasileño, lo recordó con un sentido homenaje recordando su vida, su carrera y su legado como uno de los mejores conductores en la historia de la Fórmula Uno.
Ayrton nació en Sao Paulo en 1960 y desde pequeño encontró su pasión en las carreras de autos, con un volante en la manos, pasando y destacando en todas las categorías posibles, desde los go-karts hasta llegar a la F1, dónde ocupó también los asientos de diferentes equipos como Toleman, Lotus, Williams y McLaren, conquistando en total 41 triunfos en 161 Grandes Premios con 80 podios, 65 pole positions y un récord de 6 victorias, 5 de manera consecutiva en Montecarlo, así como tres títulos mundiales, todos con McLaren, en 1988, 1990 y 1991, cifras y logros que no pudieron acrecentarse por aquel terrible accidente que cortó su vida y una trayectoria que pintaba para ser la mejor de todos los tiempos.
El estilo de conducir de Senna era especialmente atractivo para los amantes de la velocidad, ya que combinaba habilidad con agresividad, siempre corriendo riesgos buscando los rebases en momentos inesperados y logrando victorias que parecían inalcanzables. Construyó rivalidades muy especiales con otros monstruos de la época como el francés Alain Prost, el británico Nigel Mansell, el austriaco Gerhard Berger o su compatriota Nelson Piquet.
Sobre un monoplaza era rápido y dominante, incisivo y exigente, perfeccionista y controlador, con una personalidad que irradiaba seguridad en sí mismo y en sus posibilidades.
Su muerte sirvió para que se incrementaran los protocolos de seguridad tanto en las pistas como en los autos de la máxima categoría, reduciendo desde entonces el promedio de accidentes y la fatalidad de los mismos.
Ayrton Senna Da Silva tendría hoy 60 años, pero se fue mucho antes, a los 34 y nadie lo ha olvidado.