Desde el 29 de diciembre día del fallecimiento de la leyenda del fútbol Edson Arantes Do Nascimento, al fin este martes 3 de enero llegaron sus restos al cementerio de la ciudad de Santos donde fue enterrado en una ceremonia privada.
De esta forma Pelé ocupará un nicho en un mausoleo del Memorial Necrópolis Ecuménica, para que en el futuro pueda ser visitado por todos sus fieles seguidores, se dice que en inicio sería sepultado en el noveno piso en honor a su padre, por ser el número que ocupaba como jugador. Pero sus familiares pensaron que sería mejor hacerlo en el primer piso para que el acceso a sus visitas sea de más fácil acceso.
Previo a la llegada el cementerio, el cortejo fúnebre recorrió durante cuatro horas las principales avenidas de Santos, siendo escoltado por la infinidad de aficionados cantando con honores para despedir al máximo representante del fútbol a través de su historia.
El ataúd fue descargado del camión de bomberos en el que hizo el cortejo fúnebre y llevado a hombros por ocho cadetes de la Policía Militar, vestidos de gala, hasta el interior del cementerio.
UN RECORRIDO CON MOMENTOS NOSTÁLGICOS ALREDEDOR DE LA MADRE DE O´REI
El momento más emotivo del cortejo fúnebre fue cuando el camión de bomberos que transportaba los restos mortales del mítico delantero pasó por delante de la casa de la madre del astro brasileño, Celeste Arantes, que en 2022 cumplió 100 años de edad.
En ese lugar, familiares y amigos de Pelé, vieron frente a sus ojos el féretro del Rey del Fútbol, desde el balcón de la residencia de Arantes, situada en el Canal 6 de Santos, donde se concentraron cientos de personas.
Los vecinos de Santos ocuparon los dos lados del canal para homenajear a su mayor ídolo y dar condolencias a la familia con cántico
SUS RESTOS EN EL CEMENTERIO VERTICAL MÁS ALTO DEL MUNDO
Antes del cortejo fúnebre, se instaló una capilla que estuvo abierta al público durante 24 horas en el estadio Vila Belmiro, donde fueron a despedirle más de 230.000 personas, según los cálculos del club Santos.
Pelé fue velado durante 24 horas contando con más de 230,000 personas presentes, para después realizar un ceremonia religiosa, para finalmente se realizara su entierro, el cual fue a puerta cerrada solo con familiares y círculo cercano a la familia de O’rei, en el cementerio vertical más alto del mundo contando con 14 pisos.
Este mausoleo vertical representa además un estadio de fútbol que incluso cuenta con césped sintético.