Por Alex Rodríguez
El incidente tuvo lugar el 31 de diciembre de 1984, cuando Rick perdió el control de su automóvil al intentar pasar a otro vehículo.
Chocó contra una pared de piedra seca y fue arrojado lejos del automóvil ya que su cinturón de seguridad no estaba abrochado adecuadamente. La entonces novia de Rick también estaba en el vehículo, sufriendo lesiones en la cabeza, el cuello y la columna por un latigazo cervical severo.
El brazo de Allen se volvió a unir inicialmente, pero finalmente se volvió a amputar debido a una infección. Joe dijo:
“Recuerdo la llamada telefónica de nuestro gerente Peter Mensch. Dijo: ¿Estás sentado?. Y después de haber visto suficientes películas, supe que no lo dirías a menos que alguien haya muerto.
“Pero cuando dijo: ‘Tu baterista tuvo un accidente automovilístico y perdió el brazo’, no hay forma de que proceses esa información. No tiene ningún sentido. Simplemente me puse a llorar”.
“Pensé que, para Rick, no poder tocar la batería otra vez era probablemente peor que la muerte: será este cadáver ambulante que solía ser un baterista”.
“Pero dentro de unos ocho o nueve días, comenzó a decirnos: ‘Creo que he descubierto una forma de evitarlo’. Y, por supuesto, todos pensamos que solo hablaba de morfina. Pero volvió a la batería en tres meses. Fue inspirador “.
La historia de Rick Allen
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