El apoyo de los padres de Robin Van Persie no sólo fue moral sino también económico. Su pasado fue lo más normal que se pueda entender ya que no pasó ni hambre ni frío como en otros casos de futbolistas con los que ha compartido plantel. Le habrá servido luego para ser la estrella que es.
Van Persie, de 35 años, debutó como futbolista profesional con el Feyenoord en la temporada 2001/02, cuando el equipo de Rotterdam se alzó con la Copa de la UEFA.
Tres años después se trasladó a Inglaterra, donde jugó ocho temporadas con el Arsenal (96 goles) y tres con el Manchester United (48 goles). Fue Bota de Oro de la Premier League en las temporadas 2011/12 y 2012/13.
En 2015 fichó por el Fenerbahce turco, en el que jugó dos años y medio (25 goles) antes de volver al Feyenoord en enero de 2018. Con la selección holandesa jugó 102 partidos y marcó 50 tantos.
El delantero Robin van Persie, galardonado dos veces como Bota de Oro de la Premier League y titular en más de cien partidos de la selección holandesa, recibió un emotivo homenaje en el estadio del Feyenoord al jugar su último partido como futbolista profesional.
La despedida del delantero fue agridulce, ya que su equipo perdió contra el ADO La Haya (0-2) y Van Persie no materializó ninguna de las numerosas ocasiones de gol que tuvo.
El delantero fue sustituido en el minuto 92 por Dylan Vente, momento en el que toda la grada se puso en pie, el encuentro se paralizó y tanto sus compañeros como los jugadores del ADO La Haya formaron un pasillo de honor para despedirlo.
De aquí se fue como entrenador.
