De acuerdo con el Diario Sport, el más cercano a la realidad del Barcelona, el equipo azulgrana enfrenta ya serios problemas económicos, tanto por la pausa futbolística general por el covid-19 como por la falta de rendimiento de muchos de los últimos refuerzos que han llegado al equipo culé y que además de que costaron mucho dinero, siguen sangrando mensualmente a la institución azulgrana aún después de haber sido prestados a otras entidades como es el caso del brasileño Philippe Coutinho, quien regresará en junio de su préstamo al Bayern Munich tras la negativa del multicampeón alemán por hacer válida la opción de compra por el delantero sudamericano.
Otra situación muy dura para el Barca es la del campeón del mundo en Rusia 2018 con Francia, Antoine Griezmann, quien pese a su indudable calidad, simplemente no ha podido encajar en el plantel catalán por la similitud de sus funciones en la cancha con las del indiscutible Lionel Messi y porque la grada no ha logrado volverlo uno de sus consentidos pese a su innegable esfuerzo por cumplir con las indicaciones del técnico (primero Valverde y ahora Quiqué Setién).
La ficha del galo, de 120 millones de euros, y su costo mensual no han valido la pena en el análisis financiero de la dirigencia culé y se le busca ya una salida para la próxima campaña al igual que a otros que ya cumplieron un ciclo como el croata Ivan Rakitic ó el chileno Arturo Vidal, un par de grandes jugadores que igualmente han cumplido cuando han sido requeridos en el terreno de juego, pero cuya personalidad no logró nunca volverles mercadológicamente rentables para el club, además de que ya son para el medio futbolístico y el mercado mundial, demasiado veteranos como para brindarle una recuperación económica al club español.
aso aparte el de Samuel Umtiti, defensor francés y también campeón mundial, que no pudo ser el relevo generacional adecuado en la central azulgrana ni por el costado izquierdo y quien seguramente también tendrá que ser negociado al igual que Martin Braithwaite que con mucha fortuna y sorpresa fue firmado como refuerzo ofensivo y así de rápido dejará también la disciplina catalana.
Ellos y varios más como Aleña, hoy en Betis, el segundo arquero Neto ó incluso Nelson Semedo y hasta Clemént Lenglet, son otras piezas que podrían sobrar y dejarle algo de dinero al Barcelona, que además no encontró el apoyo de sus “capitanes” en el tema del ajuste salarial temporal por la crisis del coronavirus.