El conjunto californiano estaba sufriendo otra sonrojante derrota en casa contra los Phoenix Suns (en el primer cuarto ya casi perdían por 30) cuando Stephen Curry sufrió una lesión que le puede tener fuera de combate durante un largo periodo de tiempo.

Fue en el tercer cuarto cuando se produjo la jugada más desgraciada para los Warriors y para la NBA en general. El base chocó con Aron Baynes mientras penetraba al aro y el cuerpo del pívot australiano cayó justo encima de su mano izquierda provocando una fractura tal y como informó Marcus Thompson, periodista de The Athletic Bay Area.

Todavía es pronto para conocer el alcance de la lesión y Bob Myers, mánager general de la franquicia de San Francisco, informó a ESPN de que Curry será sometido a una resonancia magnética en la que se evaluará la gravedad de la lesión e incluso si el jugador necesita pasar por el quirófano. Más tarde, Ramona Shelburne, de ESPN, indicó que podría tratarse de una fractura del segundo metacarpiano de la mano izquierda.

La pérdida de Curry se suma a la de Klay Thompson, que se lesionó en el sexto partido de las pasadas Finales de la NBA. Si contamos también las bajas de Kevin Durant y Kevon Looney, los Warriors han perdido a cuatro jugadores titulares en sus últimos seis partidos oficiales.

Este contratiempo puede cambiar por completo la temporada de los Warriors, que sin Curry y sin Thompson tendrían muy complicado incluso llegar a los ‘playoffs’ tras una racha de cinco temporadas consecutivas jugando las Finales en la que ganaron hasta tres campeonatos.