En el segundo cuarto del partido entre los de Nueva York y Dallas, un pequeño felino negro invadió el emparrillado, por lo que el duelo se tuvo que detener.
En el mundo del deporte es común ver invasiones del terreno de juego por parte de animales. En México ha sucedido con perros y hasta tlacuaches, también ha ocurrido en partidos internacionales como en la Copa Libertadores. Cuando esas situaciones se presentan, los involucrados se vuelven virales en redes sociales.
Este lunes, la NFL se vio envuelta en algo así. Durante el Monday Night entre Giants y Cowboys, celebrado en Nueva York, apareció un pequeño gato negro que causó extrañeza entre los aficionados que se encontraban en las gradas. El reloj de partido se detuvo mientras el felino corría confundido por el campo. Al final, no pasó mucho para que el propio animal abandonara el campo con destino a la salida.