Ya era prácticamente un hecho que Quique Setién dejaría la dirección técnica del Barcelona desde que los culés fueron perdiendo la ruta en la Liga y hasta ver como se coronaba el Real Madrid. Y aún así, la Champions era su última oportunidad de demostrar que podía cargar con el paquete o de por lo menos despedirse con honores y sin las manos vacías del club azulgrana. Sin embargo la desastrosa, humillante y escandalosa derrota ante el Bayern Munich fue la gota que derramó el vaso, o más bien la tormenta que desbordó la presa.
Hoy ya es oficial que Setién se va después de suceder a Ernesto Valverde, después de ocho meses y tres días, dejando un balance de 16 victorias, 4 empates y 5 derrotas, pero entre éstas la peor en más de medio siglo de historia y una vitrina sin nuevos trofeos, algo que no sucedía desde hace 12 años, desde el final de la temporada 2007-2008.
Y para resolver la situación, para volver a las bases y poder recuperar tanto la mística como el hambre, la Junta Directiva que encabeza Josep Bartomeu eligió a Ronald Koeman, un hombre de “casa”, un exjugador y figura del Barcelona del final de los 80s y mitad de los 90s, un pilar en la era de Johann Cruyff como estratega, un entrenador serio, rígido, exigente, que prioriza el orden en retaguardia (hace mucha falta), pero que también y ya lo estaba haciendo con la Selección de Holanda, le dará movilidad y dinámica así como versatilidad a un equipo que se veía y se sentía aburrido de disfrutar el juego y su alto compromiso con la jerarquía de su abolengo.
No hace mucho Koeman sufrió un infarto pero lejos de temer por vivir los próximos meses al límite en el banquillo culé, el neerlandés llega precisamente para tratar de que su equipo, sus jugadores y su afición, vibren de nuevo con lo que suceda en la cancha, con Lionel Messi incluido, por supuesto.
Con 57 años, Koeman fue y es todavía el defensa con más goles anotados en la historia del futbol, con 253 en 535 partidos.
Con la playera del Barça conquisto 4 títulos de Liga, 1 Copa del Rey y 3 Supercopas de España, además de 1 Copa Europea y 1 Supercopa de Europa.
Como entrenador ya ganó también títulos en Holanda, Portugal y hasta en España, una Copa del Rey con el Valencia y ya llegó por nuevos éxitos, ahora con el Barcelona.